Cremas aliadas de la piel

La piel protege de las agresiones ambientales y sirve como filtro que favorece e impide la eliminación de agua, sales y toxinas. En el cumplimiento de estas funciones dicho órgano puede sufrir daños, por es muy importante dedicarle cuidados especiales; entre ellos, aplicarle cremas adecuadas a sus necesidades.

Es cierto que la piel del cutis es más susceptible a sufrir daños, pero no hay que descuidar la piel que recubre al resto del cuerpo, pues aunque aparentemente la ropa nos protege de las agresiones ambientales, es imposible que no presente deterioro.

Los rayos ultravioleta son capaces de traspasar los tejidos textiles y lastimar a las células; o bien, al nadar, la epidermis entra en contacto con agua salada y/o clorada, elementos que pueden resecarla, asimismo, el uso de jabones inapropiados puede ocasionar irritación y pérdida de humedad.